lunes, 30 de mayo de 2011

Responsabilidades políticas

Os dejo la carta al director que acabo de mandar a las redacciones de La Vanguardia y El Periódico de Catalunya

Los acontecimientos ocurridos el pasado viernes 27 de mayo en la Plaza Catalunya de Barcelona exigen una reacción política que está tardando en llegar. La carga de los Mossos D'Esquadra para 'limpiar' dicho espacio ocupado pacíficamente por personas de diversas edades, profesiones y estratos sociales que llevan semanas luchando por sus derechos, fue en todo momento desproporcionada y no respondió a la naturaleza de la protesta. Los Mossos D'Esquadra destacados en dicha plaza golpearon duramente a personas desarmadas y que siempre mantuvieron una actitud de resistencia pacífica y que algunas, aún hoy, permanecen heridas. Las imágenes que se pudieron ver en todo el mundo relatan perfectamente los hechos y muestran en toda su crudeza lo erróneo de la decisión tomada por los responsables de seguridad de la Generalitat.

Ni en un país con tan corto currículum democrático como Egipto se ha visto una represión policial tan violenta de una manifestación pacífica. La forma de hacer frente a la situación creada en la plaza Catalunya por parte de las autoridades policiales y sus superiores de una situación que entra del todo en los cauces de la libertad de expresión democrática, revela una negligencia, ineptitud, torpeza, y estrechez de miras que son incompatibles con el servicio a la ciudadanía, deber de todo funcionario público. Por ello, desde Madrid y como ciudadano demócrata de este país en total solidaridad con las personas acampadas en Barcelona, sus reivindicaciones y sus métodos, que desde comparto, exijo la dimisión o el cese fulminante del señor Felip Puig i Godes, Conseller d'Interior de la Generalitat de Catalunya.

sábado, 14 de mayo de 2011

¿Será la marea incontestable?

Quedan algo más de 24 horas para que se celebren en toda España las manifestaciones convocadas bajo el lema '¡Democracia Real Ya! ¡No somos mercancía en manos de políticos y banqueros!'. La convocatoria lleva siendo un hervidero en Internet desde hace semanas e incluso meses. el 'run run' empezó a circular en las redes sociales de manera casi simultánea a la convocatoria de la manifestación de JuventudSinFuturo.

La expectación por parte de los que creemos que el Fin de la Historia es una pantomima neoliberal y que la Historia con mayúsculas la construyen los pueblos es grande, pero el envite es mayúsculo.

Lo es porque somos una de las sociedades más desmovilizadas de Europa. La última vez que hemos salido a la calle en masa fue hace ahora casi un año cuando España ganó el Mundial de Sudáfrica.

Por eso el anhelo de que funcione es mayor es casi obsesivo, porque parece que la llama, por fin, está prendiendo, igual que lo ha hecho en Islandia, en Grecia, en Francia, en Reino Unido, en Portugal o incluso en Egipto y en Túnez. Es posible que la marea incontestable antineoliberal esté llegando a las costas de España.

Una marea que quiere barrer las viejas formas de hacerlo todo. Un movimiento que quiere restructurar el equilibrio de fuerzas entre el Pueblo y las élites financieras y políticas, que quiere recordarles que, aunque el sistema está muy bien montado, ni unos ni otros son nada sin nosotros, el Pueblo.

Se trata de decirles que no es de recibo que mientras en España hay casi 5 millones de parados, las grandes empresas financieras, energéticas y de telecomunicaciones siguen ganando dinero a espuertas. Se trata de decirles que la política no sirve para el enriquecimiento personal, y que la corrupción es el mayor acto de traición democrática que existe. Se trata de decirles que los representantes elegidos por el Pueblo deben tener siempre presente la defensa de los servicios públicos, pilar del Estado de Bienestar y cuyo correcto mantenimiento supone una garantía de la igualdad de oportunidades a la que toda democracia moderna debe aspirar.

Se trata, en definitiva, de volver a poner el foco de la transformación social en la gente, en el Pueblo. De volver a recuperar la dignidad y empezar a transformarnos en ciudadanos, no sólo en consumidores. De ser, como lo fueron nuestros padres y nuestros abuelos, sujetos activos del cambio social que está por llegar, y de dejarles bien claro a las oligarquías financiero-políticas que han tirado demasiado de la cuerda.

Hay que ser contundentes y decir que los jóvenes, los parados, los jubilados, las mujeres, los inmigrantes, los precarios, es decir los INDIGNADOS, no vamos a tolerar que el peso de las decisiones tomadas durante los famosos años de las 'vacas gordas', decisiones que han llevado a la debacle económica, política, social y humana más grave de la historia reciente, caiga exclusivamente sobre los hombros de los más débiles.

Es hora de hacer política, política con mayúsculas, como sólo los pueblos saben hacerla, saliendo a la calle como se hizo en el 68 en Francia y como hace algunos meses se ha hecho en las plazas de la 'primavera árabe'.

No vamos a tolerarlo más, no vamos a permitirlo más. Somos el Pueblo, y en una democracia real el pueblo debe ser escuchado. Esta plutocracia debe acabar, debe acabar la connivencia entre el mundo empresarial-financiero y las élites políticas, basta ya de tanto escándalo, de tanta vergüenza, de tanta burla. ¡El 15 de mayo TOMA LA CALLE!

Nuestro momento ha llegado.




miércoles, 11 de mayo de 2011

Surrealismo electoral vs hiperrealismo social

¡Hagan juego señores! ¡Bienvenidos al circo! La campaña electoral ha comenzado, el humo en forma de propuestas incumplibles alcanza cotas inimaginables estos días. Ayer sin ir más lejos, nos hemos encontrado dos ejemplos mayúsculos de desfachatez electoral, Ionesco, Arrabal y Breton estarían orgullosos de ver como esa corriente en la que son maestros, el surrealismo, se instala cómodamente en la cotidianeidad política.

Por un lado, Esperanza Aguirre ha hecho suya una propuesta a las antípodas de su ultraliberalismo de corte y confección thatcherianos, diciendo que la entrega de la vivienda será suficiente para saldar la hipoteca que estrangula en estos momentos a cientos de miles de familias en España. Eso sí, cuando se lee la letra pequeña, como explica en su blog Nacho Escolar, se ve que, por supuesto no es oro todo lo que reluce, ni siquiera la más mínima parte. Nadie se puede creer que una de las personalidades políticas que más favores ha hecho a las grandes fortunas de Madrid de repente le dé un vahído social y se preocupe por los hipotecados. Ah, claro, que son elecciones.

Por otra parte, y en la otra esquina del ring, o de la urna, tenemos a nuestro insigne presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero que se despacha ayer con la siguiente frase "Quien diga que hemos hecho recortes miente como un bellaco". Carlos Carnicero deja bien clarito y en pocas palabras, los recortes que se han hecho. La amnesia es otra de las características de los periodos electorales.

Todo este surrealismo, esquizofrenia, trastorno de personalidad contrasta duramente con el hiperrealismo cotidiano de cientos de miles de familias españolas que no pueden pagar su casa. De millones de personas que quieren trabajar y no pueden, de aún más millones de jóvenes formados que pelean día a día por encontrar un empleo.

Queda cada vez más claro que en la sociedad de la representación nada es lo que parece, y nadie duda en ponerse uno u otro disfraz para conseguir sus objetivos.

Recomendación para ponerle música a la indignación